Dos oficiales, hermanos entre sí, que participaron de una fiesta clandestina fueron sancionados por las autoridades de la Unidad Regional II y trasladados a nuevos destinos ordenados por la Jefatura de la Policía de Misiones.
Hasta el viernes, los funcionarios cumplían tareas en las seccionales Primera y Cuarta de Oberá, mientras que ayer fueron notificados de sus nuevos destinos en dependencias de las localidades de Comandante Andresito y San Pedro, respectivamente.
Según precisaron fuentes de la fuerza, en la madrugada del sábado la Seccional Segunda fue alertada de la realización de una fiesta clandestina en un domicilio particular en jurisdicción de Villa Bárbaro.
Al llegar al lugar, los uniformados constataron la presencia de varios vehículos particulares, por lo que tomaron contacto con los dueños de casa, a quienes notificaron de la infracción cometida.
En consecuencia, intimaron a los participantes a retirarse del lugar, y grande fue la sorpresa de los efectivos al constatar que dos de sus camaradas se hallaban participando del evento, por lo que dieron aviso a la superioridad.
“No podemos apañar este tipo de conductas y por eso se ordenó una medida ejemplificadora y el traslado a otras jurisdicciones. Como policías no podemos estar todo el día aconsejando a la gente para que cumpla con los requisitos del distanciamiento social y hacer todo lo contrario cuando estamos de franco. Es un contrasentido total”, subrayaron.
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