La comunidad universitaria de Oberá, junto con los gremios docentes y no docentes, se sumó este miércoles a la Marcha Federal Universitaria en defensa de la educación pública, gratuita y de calidad y contra los recortes presupuestarios que afectan gravemente al sistema universitario. La manifestación también se repite en distintos puntos del país.
Por segunda vez en el mandato de Javier Milei se lleva adelante una Marcha Federal Universitaria. Estudiantes, docentes, trabajadores universitarios, junto a organizaciones políticas y sindicales reclaman al Congreso Nacional que insista con la Ley de Financiamiento para las casas de estudio, que será vetada en las próximas horas por el presidente, según anticiparon desde el Gobierno.
Desde la asunción del nuevo gobierno, las Universidades Públicas han sufrido un severo ajuste en su financiamiento. Los salarios de los docentes y no docentes acumulan un retraso del 60% con respecto a la inflación, mientras que los presupuestos destinados a proyectos de investigación, extensión y vinculación han sido drásticamente reducidos. Aunque tras la marcha del 23 de abril el gobierno incrementó en un 270% el presupuesto para gastos operativos, este solo representa el 10% del total necesario para garantizar el funcionamiento pleno de las universidades. A esto se suma el reciente veto a la Ley de Financiamiento Universitario, que había sido aprobada por amplia mayoría en ambas cámaras y que aseguraba el presupuesto para salarios y gastos ajustados por el índice de precios del consumidor (IPC). Asimismo, el proyecto de presupuesto para el año 2025 propone asignar solo el 50% de lo solicitado por el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), lo que pone en riesgo el futuro del sistema universitario nacional.